Aunque no podamos celebrar el Día del Padre como siempre, los saludamos con más emoción que nunca.
Porque sus enseñanzas y ejemplo nos prepararon para afrontar difíciles situaciones como la actual, y nos ayudan a salir adelante.
Grandes motivos para decir, una vez más: gracias por todo, papá.
Somos Corredores.